• SOSTENIBILIDAD TURÍSTICA
Se abre el plazo para la segunda convocatoria de los Planes de Sostenibilidad Turística
Además, Euskadi podrá optar a la partida extraordinaria de 50 millones que el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo pondrá a disposición de las CC.AA. en materia de enogastronomía.
Euskadi recibirá, asimismo, 3,9 millones para ayudas a la mejora energética de alojamientos turísticos.
El Gobierno y las Comunidades Autónomas han acordado lanzar una nueva edición extraordinaria de los Planes de Sostenibilidad Turística en Destino, financiada con 720 millones de euros procedentes de los fondos de recuperación europeos Next Generation EU. El 7% de este presupuesto se reservará a proyectos centrados en la enogastronomía, la prioridad nacional identificada para este 2022.
Euskadi recibirá 67 millones de euros en tres años para los Planes Territoriales de Sostenibilidad Turística. De ellos, 24 millones se están ejecutando ya en 11 proyectos aprobados en 2021. El plazo de solicitud para los proyectos del 2022 comenzará el 1 de abril. Hasta el 17 de mayo, las entidades locales y Comunidades Autónomas podrán presentar sus proyectos ante el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.
El programa financia tanto iniciativas presentadas por entidades locales (sometidas a un proceso de evaluación conjunta por parte de la Secretaría de Estado y la Comunidad Autónoma) como Acciones de Cohesión entre Destinos diseñadas por Comunidades Autónomas.
Eficiencia energética
Además, tal como se ha ratificado hoy en la Conferencia Sectorial, Euskadi recibirá 3,9 millones de euros para proyectos de eficiencia energética y economía circular en alojamientos turísticos (hoteles, campings, alojamientos turísticos y alojamientos rurales).
Las actuaciones subvencionables deberán dedicarse a la mejora de la eficiencia energética de la envolvente térmica, el uso de energías renovables en las instalaciones térmicas de calefacción, refrigeración, climatización y agua caliente sanitaria, y la mejora de las instalaciones de iluminación.
Las actuaciones tendrán que conseguir y justificar una reducción del consumo de energía primaria no renovable del 30% con respecto a la situación de partida.
